El seleccionado argentino se clasificó hoy a la tercera final de la historia de los mundiales, al superar a su par de Francia por 80-66 en Beijing, China.
Los antecedentes de los equipos nacionales son en el Mundial de Buenos Aires 1950 e Indianápolis 2002, Estados Unidos, en los que salió campeón y subcampeón, respectivamente.
En el primer caso, Argentina superó a Estados Unidos por 64-50 en un estadio Luna Park repleto, en el primer certamen mundialista de la historia. Aquella noche, Hugo Del Vecchio aportó 14 puntos y fue el goleador del partido.
El recorrido del seleccionado se inició con un triunfo sobre Francia (56-40) y continuó en la zona de clasificación contra Brasil (40-35), Chile (62-41), Francia (66-41) y Egipto (68-33). El sistema de competencia constó de 10 representativos, con Fase Preliminar y Repechaje para luego ir por el título.
Por su parte, Indianápolis 2002 marcó el punto de partida de la Generación Dorada, con un subcampeonato polémico ante Yugoslavia (84-77) en tiempo suplementario tras una falta no cobrada en favor de Argentina en el final del tiempo regular.
El interno cordobés Fabricio Oberto (20 puntos y 10 rebotes) sobresalió en un plantel que contaba con Luis Scola, Emanuel Ginóbili y Andrés Nocioni, entre otros.
En este caso, el camino dejó en la memoria emotiva la victoria contra Estados Unidos, formado por jugadores de la NBA, y que marcó la primera caída de la historia en mundiales.
Argentina derrotó a Venezuela (107-72), Rusia (100-81) y Nueva Zelanda (112-85) en la primera ronda; a China (95-71), Alemania (86-77) y a Estados Unidos (87-80) en la segunda fase; a Brasil (78-67) en los cuartos y a Alemania (86-80) en la semifinal. (Télam)
Pasado y presente
En la actualidad, Luis Scola es el emblema de la actual Selección Argentina que se metió en la gran final del Mundial China 2019. También es uno de los pilares del equipo y líder dentro y fuera del campo de juego.
Con cinco mundiales en sus espaldas, también estuvo presente en Indianápolis 2002 en aquella histórica medalla de plata que marcó a fuego a la Generación Dorada. Ahora en Asia, Scola tiene una nueva final y su revancha deportiva para alcanzar el título que entonces resultó esquivo.